Mi dulce espera...

La espera, en ocasiones una tortura, otras veces un delirio; delirio de pasión que desata los amaneceres más furtivos, entre rojos intensos, naranjas chillones, amarillos tenues, azules eléctricos...Amaneceres que rompen el silencio de un sueño anoche conciliado...
La calma ya no existe ni ha de existir tampoco...vibrar al sentirte, derretir la esencia del alma mientras susurramos te quiero, erizar la piel mientras la imaginación acude a esos intensos abrazos un día dibujados entre acasos...entre casuales momentos cargados de un valor jamás buscado...
Masticando segundos, contando momentos y tenerte cerca de nuevo...poder sentir el aroma de tu pelo cuando pícaramente te acercas...y dejar que dos miradas hagan el amor invisibles a cuanto les rodea...jugar con el tiempo que no existe...caminar entre nubes de ensueño...tatuar tu olor en mi piel mientras tus brazos me rodean...y no dar lugar a la imaginación...tan sólo vivir de impulsos, de esos latidos que conforman un todo y a la vez, nada...Nadar entre esperanzas en las que dos manos desconocidas estén ligadas para siempre...Estar a tu lado...
Me pregunto si podría existir tanta felicidad en una misma vida,...tenerte, sentirte, y amar...como jamás nadie haya amado...como nunca nadie supo describir...amar con inocencia, con pasión, con delirio, de forma impulsiva y a la vez precavida...
Soñando sigo hasta que estés a mi lado....hasta que vengas..hasta que te quedes, hasta que te tenga y pueda fundir tu vida a la mía en un solo momento